miércoles, 16 de noviembre de 2011

Soy yo

Un trabajo de filosofía de hace unos días me hizo pensar.
Escribí la redacción rápido y sin pensar, para que me diera tiempo a entregarlo ese mismo día, pues por la tarde tenía que estudiar dos exámenes y no me iba a dar tiempo, así que me quedé con ganas de poner muchas cosas.
En primer lugar, al pensar en cómo soy, supongo que lo primero que me viene a la cabeza es mi nombre. Cristina Joga. De primeras, Cristina me resulta muy serio, y la mayoría de la gente me llama  Cris. Yo me presento como “Cris”. Joga, mi apellido y uno de mis mayores orgullos. Supongo que por mi familia, que es en lo que me he basado para crecer y formarme como soy ahora… y por mi abuelo, que llevo un poquito de él dentro de mi, no solo por llevar su mismo apellido, si no porque la fecha de nuestros nacimientos es la misma: 12 de octubre, y me gusta pensar que el día que nací fui un regalo para él. Pero esto no viene a cuento…
Luego supongo que pienso en mi carácter.
Sí, soy alegre y me gusta ser feliz. Tengo la necesidad de intentar que todo el mundo lo sea cuando está conmigo, y que sonrían, y a veces tengo miedo de ser un poco pesada por eso de querer que la gente esté contenta, cuando no tienen ganas. Es hipócrita por mi parte, porque cuando yo no quiero sonreír, no lo suelo hacer, y tengo días de auténtico pesimismo que no suelo compartir con nadie, solo con la gente que se preocupa por mí de verdad.
Soy…soy cabezota, y desordenada, soy muy vaga. Pero mucho. Y adoro dormir, podría dormir 24 horas seguidas. Siempre llego tarde. Bueno, el 99% de las veces, y si llego puntual, me siento orgullosa de ello.
Clasifico las cosas por sensaciones. Y la sensación que más me gusta es la de sacar sonrisas. Me siento genial si lo hago.
Me encanta la música, toda en general, no juzgo ningún tipo, porque siempre hay alguna canción que me llama la atención.
Soy borde en bastantes ocasiones, y me cuesta admitirlo. Pero no me cuesta pedir perdón, y si puedo lo hago.
Odio ver a la gente mal. Pero odio más no poder ayudar.
Vivo todo demasiado, quiero decir, con demasiada intensidad. Y lloro mucho. Sea por felicidad o tristeza, con una sonrisa y sin ella, muchas veces lloro. Pero sola. Si lloro con alguien al lado es porque tengo mucha confianza con esa persona, y estoy a gusto de verdad, o eso, o que no lo puedo evitar, en ese caso es preocupante de verdad.
Soy de esas personas que le gusta decir lo que sienten, y me encanta decirle a la gente que quiero que lo hago. Y una de las cosas que más me gustan son los abrazos. Y los abrazos de verdad, de esos que te gustaría que no acabaran nunca.
Hago mucho el tonto, y sí, soy una payasa, y lo reconozco.
Me río mucho y de casi todo.
Soy rara, y me gusta encontrarme con gente rara, diferente del resto de personas que me parecen iguales. Y digo me parece porque también soy consciente de que todos somos diferentes.
Hablando de la gente, me gusta encontrarme con personas con las que puedo hablar, sea de algo serio, o de la mayor tontería del mundo.
Me gusta leer, y el autor que más me llega es Albert Espinosa, y algún día me gustaría escribir y expresarme tan bien como él lo hace para mí.
Lo mejor me suele pasar en viernes, y lo peor los lunes. Pero no es una regla, a veces cambian las tornas.
Me gustan los 28’s.
Me llaman gnomo.
Me gusta sentirme querida. Y si me siento así, me gusta ser detallista y hacer feliz a la gente. También me gusta que la gente tenga detalles conmigo.
Me gusta mucho hablar, y eso lo sabrán mis amigos, y a veces hablo demasiado. Me gusta reírme de mi misma.
Me gusta que la gente me diga que le gusta como escribo.
Soy de decir mucho "y ya está" al final de la frase.
Me fijo mucho en las cosas, aunque normalmente no lo diga, pero me doy cuenta de esos pequeños detalles, de las personas que hablan conmigo, o simplemente al ir en el metro, me gusta fijarme en la gente, en su expresión y en su forma de mirar. Si encuentro a una persona que me parece especial, que destaque, la miro más que a las demás, y si me pillan mirándoles, me gusta sonreírles, y me gusta que me devuelvan la sonrisa, si no lo hacen, yo sigo sonriendo y aparto la mirada.
Soy una persona a la que le gusta salir a andar, sola, con la música a todo volumen por la calle y pensar. A veces vuelvo a casa con las pilas cargadas, pero otras sin nada de batería.
Y lo que más me gusta, lo que más soy es una persona que evoluciona, y que cada día descubre más cosas de si misma.
Y sobre todo, soy de esas personas que intenta luchar cada día para ser un poco mejor, lo intento.
Creo que podría decir muchas más cosas de lo que soy, o de lo que me gusta, pero supongo que eso no lo tengo que decir yo, si no las personas que se interesen por saberlo.
Así que, soy yo, y por mucho que diga de mí, no podría definirme del todo.


miércoles, 9 de noviembre de 2011

Somos el resultado de todo lo que hemos vivido.

Hay un punto en la vida en el que miras hacia atrás, y piensas en todas esas etapas y épocas de tu vida que has pasado.
Y yo hoy lo he hecho. Y me he dado cuenta de que nunca me había sentido tan feliz como cuando estoy con ellas.
No exagero, es verdad.
Nunca me he sentido tan yo como cuando las tengo al lado, nunca puedo ser tan natural y decir todo lo que pienso. No juzgan, no engañan, sienten, lloran, ríen y te dejan formar parte de ello.
He encontrado mi sitio perfecto, las personas que mejor pueden hacerme sentir.
Cada día me lo demuestran más…
Cada persona necesita sentirse parte de algo, de algo especial, necesita saber que no está sola… y yo, he descubierto lo que es eso.
No puedo estar más orgullosa de las personas que he elegido para ello.
Son personas que tienen una forma increíble de ser.
En este puente…solo puedo decir que me queda aun más claro que ellas son lo que quiero en mi vida. Ellas son mis amigas, mi mejor apoyo y las que me ayudan a sonreír cada día.
Porque creo que lo que hace que todo esto sea tan perfecto es la risa. Las sonrisas que salen solas al vernos, los abrazos y las lágrimas que quedan en un recuerdo bonito, en una noche genial en la que estuvimos juntas, y no dormimos apenas, porque no queríamos que pasara el tiempo.
Las despedidas son difíciles, lo sé, todas lo sabemos.
Y también sabemos que cada despedida cuesta más…
Pero no me importa, porque seguiremos juntas. Y eso es algo increíble… juntas, estando lejos.
Y aun así, yo os noto más cerca cada día, más conmigo.
Todo esto, ya lo sabéis, pero no viene mal recordarlo… porque a mí no me hace falta eso de “no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes” yo ya sé lo que tengo.
Simplemente GRACIAS. Y no me cansaré de decirlo nunca.
Como ya hemos dicho más veces, esto solo es el principio… tenemos mucho tiempo por delante, muchos más momentos y mucho más que pasar. El plan perfecto de nuestras vidas.
Hemos compartido algo que nos ha unido, ya sabéis, y el destino ha querido que yo esté aquí, ahora, escribiendo esto y sonriendo mientras me acuerdo de los reencuentros, de los momentos, chorradas, viajes en metro interminables, conversaciones sin ningún tipo de sentido, véase Guzmán el bueno e Islas Filipinas ;) , y momentos viendo videos, escribiendo, o tumbadas hablando de nada en concreto.
 Sois la fuerza que tengo día a día. Sois risa, porque como dijo alguien “la risa es lo que permanece con las espartanas…ese es nuestro oficio”.
Nos queda mucho que vivir, estoy segura, y todo esto son recuerdos imborrables que nos hacen más felices.
No sé como puedo tener tanta suerte, suerte de teneros.
Os quiero, muchísimo.

"Que juntos fuimos algo especial"